miércoles, 3 de octubre de 2012

SANTO CAMPO


¿Camposanto?
Lugar vallado,
con puertas,
sin ventanas,
do llevan muertos
a los que fueron vivos.
¿Santo? Desprovistos
de peligros, sin ocasiones,
no hay transgresiones.
Ya ni tierra te cubre...
muchos vanos detalles,
caricias a destiempo,
acompañan tu cadaver
enfundado en ostentoso
traje de seca madera.
Te guardan en un estante
de piedra y yeso,
un elemento más
de una macabra colección
de parroquia o ayuntamiento.
Te encierran, te lapidan
piedra de mármol
herida de letras
te historian.
Te inundan de flores
Ahora que oler ya no puedes
rey de coronas...
Mañana serás
festín de gusanos
mondos huesos
impalpable polvo;
eso sí, bien guardado.
Igual duras muerto
más que duraste vivo.
Tu tumba, escarnio
de los que no te amaron,
y de los que fueron tuyos,
lento y seguro olvido
y anual fastidio.
Mejor rápido quemado,
cenizas en tarro de barro,
y sobre abismal acantilado
en día de fuerte viento,
libre e inmerso en en aire
como pájaro desenjaulado
volar, volar bien alto

1 comentario:

  1. Descarnado poema!!
    Me cuesta comentarte, soy de las que no les gusta pensar en la muerte
    Pero me enredo bonito, de aire con tu último verso!

    Besos grandes!

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